El mercado está en constante cambio y la competitividad es mayor cada día. Por ello, ya te habrás dado cuenta de que la fusión y la absorción de empresas es una estrategia muy habitual. Cada vez es más común que compañías opten por este tipo de métodos para adaptarse a las transformaciones que sufre su sector.
Sigue leyendo y en menos de cinco minutos podrás descubrir cuáles son las diferencias entre una fusión y una absorción de sociedades, cuáles son sus características y cómo saber cuándo es el mejor momento para hacerlo.
¿Qué entendemos por absorción de empresas?
La absorción de empresas, aunque no es imprescindible, es un proceso que se suele darse de forma desigual. Es decir, involucra a una compañía en una posición de fuerza y provoca la desaparición de la otra Sociedad.
Por tanto, este proceso es la unión de dos empresas en la que una desaparece totalmente y se integra en la compañía que la ha absorbido. En estos casos la Sociedad resultante aumenta su valor, ya que se queda con todos los activos y pasivos de la empresa absorbida.
La absorción es muy útil para eliminar a la competencia del mercado en el caso de que se vea a la otra compañía como un posible rival en el futuro (por ejemplo, por su capacidad para conquistar nuevos mercados) o para hacerse con el patrimonio de la empresa que se absorbe.
Este proceso implica la desaparición de la empresa absorbida.
Existen dos tipos de absorción:
- Absorción amistosa: la empresa que desaparece está de acuerdo con el proceso. Los directivos de ambas compañías llegan a un acuerdo de compraventa, se venden las acciones y el negocio absorbido desaparece como Sociedad Mercantil.
- OPA hostil: una absorción no amistosa. Una compañía compra las acciones de la otra de la otra Sociedad Anónima sin pactarlo hasta hacerse con una mayoría de participaciones. OPA hace referencia a Oferta pública de adquisición.
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Diferencia entre una fusión y una absorción comercial
No debemos confundir ambos términos. En la absorción una de las empresas se extingue para quedar enmarcada dentro de la compañía absorbente. En la fusión pura ambas compañías se unen para formar una nueva Sociedad. Dicho de otra manera, las dos empresas desaparecen para formar una totalmente nueva.
¿Cuándo se produce la fusión por absorción?
La fusión por absorción se suele dar por los los supuestos ya mencionados. Es decir, para aumentar el patrimonio o para reforzar tu posición en el mercado. Aún así, sí que podemos diferenciar varias situaciones en las que optar por la absorción o por la fusión es una buena idea:
- Diversificación: hacerse con otra empresa puede ser útil para aumentar tu oferta de productos y servicios aprovechándote de lo que ya ofrece la otra compañía.
- Asegurar la cadena de suministro: para determinados sectores, la cadena de suministro es vital ya que es lo que les permite mantener activos los procesos productivos. Este es un método para asegurarse el control y aumentar la rentabilidad.
- Mejorar la distribución: es un caso similar al anterior. Por ejemplo, para mejorar la distribución en un territorio donde la presencia de tu compañía no es tan significativa.
- Nuevos mercados: irrumpir en un mercado extranjero es muy costoso. La adquisición de una compañía que ya opera ahí es una forma de contar con clientes y equipos desde el primer momento.
- Patentes y licencias: en determinados casos la compra de una empresa es la forma más sencilla (e incluso barata) de adquirir una patente que puedas necesitar para el crecimiento de tu Sociedad.
¿Qué pasa con los trabajadores de la empresa absorbida?
Primero de todo, a veces el motivo por el que se decide absorber una empresa es debido a la calidad de su capital humano. Pueden tener un personal capacitado y el talento vale dinero.
Desde el punto de vista del trabajador, en principio, no debe preocuparse. Una vez completado el proceso, los empleados pasan a formar parte de la empresa absorbente y se produce una subrogación de todos sus derechos y obligaciones laborales que tenían.
¿Cómo se tramita una fusión por absorción?
En la fusión por absorción una o varias sociedades se extinguen para integrarse en otra que ya existe. A nivel jurídico el proceso se lleva a cabo a través de la transmisión en bloque de sus patrimonios a cambio de otorgar a los socios de las compañías absorbidas las participaciones, acciones o cuotas de la sociedad pactada.
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