Vender una empresa pequeña es un proceso complejo y puede ser un desafío tan inmenso como si de una gran compañía se tratara. Por ello, es necesario saber todos los procesos que debes cumplir y cómo lograr las mejores condiciones.
Antes de embarcarte en esta importante decisión, es fundamental considerar diversos factores para asegurarte de obtener el mejor precio por tu negocio y acordar las condiciones más favorables.
En este artículo, exploraremos consejos y estrategias clave para vender una empresa pequeña; desde la evaluación inicial hasta la preparación para la auditoría previa a la venta.
¿Qué debes considerar antes de vender una empresa pequeña?
Debes saber que el 75 % de los emprendedores que venden su compañía se arrepienten en el primer año. ¿Por qué? Normalmente es porque sienten que se han dejado dinero en la mesa o no están conformes con las condiciones pactadas. Para evitarlo, estos son los aspectos que debes considerar:
- Márcate objetivos: evalúa por qué quieres vender la compañía, qué pretendes lograr tanto a nivel personal como empresarial y qué esperas obtener. Además, debes saber si quieres seguir involucrado en la compañía o si quieres desvincularte completamente.
- Valora tu empresa: no es el único aspecto que debes tener en cuenta, pero para fijar un precio de venta debes saber valorar tu compañía. Para ello apóyate en varios métodos de valoración.
- Demuestra tu escalabilidad: lo que más va a valorar un inversor es que tu empresa tenga capacidad para seguir creciendo. Ten en cuenta que él va a seguir invirtiendo una vez compre la compañía. Implementa procesos de escalabilidad y estarán dispuestos a pagar más por tu empresa.
- ¿Cómo valoras a tu equipo directivo?: el factor humano ha cobrado mucha importancia en el mundo empresarial. Los trabajadores y directivos son vitales para garantizar el crecimiento de una empresa. Rodéate de los mejores y podrás vender por un precio más alto.
- Apóyate en especialistas: como ya te hemos comentado, si demuestras que tu empresa es escalable conseguirás que los inversores estén dispuestos a pagar más. Apóyate en expertos que sean capaces de implementar procesos de escalabilidad comprobados y que te sean de utilidad.
¿Cuándo una empresa se considera pequeña?
En términos generales, una empresa se considera pequeña cuando tiene una cantidad limitada de empleados y un volumen de ingresos anuales por debajo de ciertos umbrales establecidos por cada país o industria.
En el caso de Europa, podemos hablar de pymes cuando la empresa no tiene más de 250 empleados y el volumen de negocio no excede los 50 millones de euros o su balance anual no excede los 43 millones. Además, su estructura organizativa suele ser más simple.
Dentro de las pymes, también hablamos de pequeñas empresas cuando no superan los 50 trabajadores y su volumen de negocio no supera los 10 millones ni el balance anual los dos millones de euros.
¿Cómo se calcula el precio de venta de una pyme?
Para calcular el valor de una pyme es muy habitual fijarse en el EBITDA o en otros métodos como los descuentos por flujos de caja. Eso sí, esto debe ser orientativo; recuerda que nunca debes confundir el valor de tu empresa con el precio de venta que puedes conseguir por ella.
Sin embargo, el precio real por el que puedes vender una empresa se basa en múltiples factores como su desempeño financiero, perspectivas de crecimiento, activos tangibles e intangibles, reputación de la marca y posición en el mercado.
¿Qué estrategia de venta deben aplicar las pymes?
Es vital que prepares tu empresa para la venta con antelación e implementes procesos de escalabilidad. De esta manera, conseguirás aumentar el precio de la transacción. Por ello, tu principal objetivo tiene que ser saber qué pretendes conseguir de la transacción y cómo hacer que tu compañía sea lo más atractiva posible para los inversores.
En la misma línea, un error que se suele cometer es atarse a un solo posible comprador. Con esta estrategia darás todo el poder de la negociación al inversor y no acabarás consiguiendo el mejor precio posible.
Como alternativa, te proponemos crear un gran embudo de inversores para tomar el control del proceso y que no tengas que aceptar la primera oferta.
¿Qué errores comunes debo evitar al vender mi pequeña empresa?
Al vender una empresa pequeña es importante evitar algunos errores que podrían afectar negativamente el proceso de venta. Estos son los más comunes:
- Falta de preparación: no prepararse adecuadamente para la venta hará que no llegues al máximo número de inversores. Prepárala con tiempo y utiliza procesos de valor comprobados.
- Cuida la información que compartes: la falta de experiencia puede provocar que des más datos de los necesarios al comprador. Además, es fundamental que firmes un NDA (Acuerdo de Confidencialidad).
- No te limites a un solo inversor: que tu empresa sea una pyme no significa que no haya decenas de compradores interesados. No te ates a un solo comprador porque de esta manera será imposible que tengas el control de las negociaciones. Crea un gran embudo y califica al máximo número de inversores.
¿Todavía tienes dudas? En NIO Ventures somos expertos en el tema, contáctanos y te resolveremos cualquier pregunta que tengas.