Una de las principales preocupaciones de cualquier empresario es contar con una adecuada financiación que permita llevar a cabo sus operaciones y proyectos.
Existen diversas formas de financiación que pueden ser utilizadas por las empresas, cada una con sus propias peculiaridades y ventajas. Según las características y posibilidades de cada entidad, una opción será más favorable que otra.
En este artículo exploraremos los diferentes tipos y métodos de financiación empresarial, así como las fuentes más populares. Sigue leyendo y en cinco minutos adquirirás una visión global.
¿Cuáles son los tipos de financiamiento para una empresa?
La forma en que una entidad se financia es un indicativo de sus planes a largo plazo y de la viabilidad, pero también de qué trabajo ha realizado hasta ese momento.
En todo caso, podemos diferenciar entre varios tipos de financiación.
¿Cuántos métodos de financiación existen?
Principalmente podemos dividir las fuentes en dos tipos:
- Interna: utiliza los recursos generados por la compañía. Puede ser consecuencia de la actividad del negocio o de las amortizaciones productivas y provisiones.
- Externa: hoy nos centraremos principalmente en estas. Tienen un origen muy variado y se generan cuando la compañía necesita apoyarse en fuentes ajenas para financiarse. Su principal ventaja es la rapidez y facilidad que tiene.
A continuación te explicamos las fuentes más comunes que existen:
Póliza de crédito
Es un contrato en el que la entidad financiera (generalmente un banco) pone a disposición de la compañía una determinada cantidad de dinero en un tiempo determinado. Se formaliza mediante un contrato en el que quedan fijadas todas las condiciones, intereses y plazos de devolución.
Su funcionamiento es similar al de una cuenta corriente y el contratante pagará intereses únicamente por el dinero que utilice y no por toda la cantidad que tenga a su disposición. Por ello, es una herramienta muy utilizada por los empresarios para realizar ajustes en el día a día sin el peligro de excederse con el endeudamiento o quedarse cortos.
Préstamo bancario
El préstamo también es una operación que tiene como protagonista a una entidad financiera. En este caso pone a disposición una cantidad de dinero que, indiferentemente del que se utilice, tendrá que devolver junto con unos intereses. Para ello se fijan una serie de cuotas.
En definitiva es un compromiso que adquieren ambas partes y que consta de tres elementos: los intereses a pagar, los plazos fijados y el capital solicitado.
Factoring
En el factoring la empresa cede una serie de facturas de venta a una entidad financiera, que se hará cargo de gestionar su cobro. A cambio, la entidad les dará el dinero que hubieran generado menos una comisión.
Es decir, con esta metodología renuncias a un porcentaje del beneficio pero obtienes liquidez antes de lo previsto.
Microcrédito
Como su nombre indica, el microcrédito consiste en un préstamo de menor cantidad. Sus plazos también son más cortos y, en ocasiones, también pueden ir acompañados de mayores intereses.
Suelen ser utilizados por personas o empresas que por su situación no pueden acceder a la banca tradicional y a las condiciones que exigen. La cuantía máxima para ser considerados de este tipo es de 3.000 euros.
Crédito comercial
También conocido como de proveedores, permite disfrutar de los servicios de estos y pagarlos más adelante. El proveedor es el que concede un crédito al cliente para que utilice sus servicios, suelen fijarse para el corto plazo y no suelen tener intereses.
Por ejemplo, una oficina compra nuevas tecnologías y el proveedor le concede tres meses para pagarlo. No tendrá intereses y durante este tiempo ya puede disfrutar de ello.
Crowdfunding y crowdlending
Ambos métodos van enmarcados dentro de las nuevas oportunidades que ofrece internet. El crowdfunding es un método de financiamiento colectivo en el que los inversores contribuyen con una cantidad de dinero a cambio de una recompensa o una participación en la empresa. El empresario fija una cantidad objetivo y todo el mundo es libre de unirse en la inversión al proyecto.
El crowdlending es similar al crowdfunding, pero en lugar de recibir una participación en la empresa, los inversores reciben un retorno de inversión en forma de intereses.
Business Angels
Los Business Angels son inversores que invierten capital en empresas emergentes a cambio de una participación en la empresa. A veces, también quieren participar directamente en la toma de decisiones.
Por sus características son inversores que se involucran más directamente en el día a día de la compañía y, por ello, valoran mucho el capital humano de la entidad.
Capital de riesgo
Este tipo de financiamiento se basa en un tipo de institución colectiva de inversión, que se centra en la inversión en empresas. Por ello, buscan un retorno de la inversión.
Hay que tener en cuenta que, dependiendo del fondo, tomarán un mayor riesgo en sus operaciones y en base a ello también tendrán un retorno de la inversión previsto más o menos elevado.
¿Qué tipo de financiamiento es más conveniente?
Hay una respuesta diferente para cada empresa y, por ello, lo mejor es que te apoyes en expertos para decidirlo. Por ejemplo, si lo que necesitas es obtener liquidez en el corto plazo para hacer frente a un pago imprevisto tendrás unas alternativas. En cambio, si tu proyecto es lanzar una nueva línea de productos o renovar toda la maquinaria de un área de negocio, deberías optar por otras vías.
De la misma manera, será necesario conocer plazos de devolución, intereses, todas las condiciones de pago, etc. Por estos motivos, es necesario que la entidad conozca cuál es la situación y analicen de manera meticulosa todas las opciones.
¿Todavía tienes dudas? En NIO Ventures somos expertos en el tema, contáctanos y te resolveremos cualquier pregunta que tengas.
