Contratar a asesores profesionales, liquidación ordenada, concurso voluntario de acreedores… Seguro que son términos que te suenan. ¿Pero puedes vender una empresa con deudas? Parece imposible pero cada vez más inversores se plantean adquirir un negocio endeudado .
Comprar empresas que tengan deudas puede ser un proyecto rentable. Montar un negocio desde cero supone una inversión inicial y mucho esfuerzo hasta ver los primeros beneficios. Sin embargo, una entidad con años de experiencia -pese a su falta de liquidez- tiene una imagen de marca creada, está posicionada frente a la competencia y ya tiene una cartera de clientes.
¿Se puede vender una empresa con deudas?
La respuesta corta es que sí puedes vender tu empresa aunque tengas deudas. Pese a que la situación de tu negocio no sea boyante, tiene un valor de mercado que debes conocer. Por tanto el primer paso será averiguar cuál es el valor de tu empresa. Este cálculo lo puedes realizar apoyándote en profesionales que analicen activos, pasivos, posición en el mercado, trayectoria, etc.
Además del conocimiento del valor de tu negocio, las deudas contraídas pueden marcar la diferencia. Obviamente cuanto menos obligaciones existan, más fácil será el proceso y, por ello, necesitas saber la cuantía y también su situación.
¿Quién paga las deudas de una empresa?
Cuando llegue la hora de vender, el nuevo propietario se hará cargo de las deudas. Pese a ello, la ley indica que tu compromiso como gestor y la responsabilidad sobre las deudas no vence hasta 2 años desde la compra.
Además, tener deudas avaladas a tu nombre conlleva muchas dificultades si no estás bien asesorado. Esto se debe a que si vendes tu negocio, esos avales no los puedes gestionar.
¿Cuándo prescribe una deuda de la empresa?
Como gestor tu responsabilidad sobre las deudas de la empresa que ya está creada es de 24 meses. Sin embargo, la ley establece un plazo de prescripción general de cinco años -anteriormente era de 15-. Aún así, los plazos de prescripción varían según la naturaleza y el origen de la deuda (Deudas hipotecarias, bancarias, con la seguridad social, etc.).
¿Cómo vender una empresa con deudas?
Has realizado un cálculo meticuloso de tu nivel de endeudamiento, conoces la liquidez del negocio y el valor de mercado que tu empresa puede alcanzar. Es el momento de buscar un comprador y, la realidad, es que no es una tarea sencilla.
De la misma manera, tendrás que decidir entre desligarte completamente del negocio con deudas o también es posible vender únicamente un porcentaje. Con la segunda opción adquieres algo de solvencia y te mantienes vinculado a la compañía.
Entender al comprador es vital para que logres un acuerdo ventajoso para tus intereses. Quienes opten por adquirir una empresa con deudas asumen un riesgo y unos costos, por lo que el objetivo es encontrar a alguien que sea capaz de afrontar los compromisos establecidos. En este apartado la negociación es crucial y no dudes en apoyarte en expertos para lograr la mejor salida posible.
¿Por qué compran una empresa con deudas?
Los motivos que llevan al endeudamiento de un negocio son diversos. Quizás se trate de que está mal administrada, falta experiencia en el sector o de que el plan de márketing no sea adecuado. Sin embargo, existen muchas razones por los que realizar este tipo de inversiones es rentable.
Los pros de comprar una empresa con deudas
En ocasiones al negocio simplemente le falta un poco más de experiencia o una mejora en la maquinaria o mano de obra, pero el proyecto sí que tiene puntos fuertes. Alguna de las ventajas son las siguientes:
- Ampliar o diversificar el negocio: si está en el mismo sector, otros empresarios pueden apostar por fortalecerse en el mercado frente a la competencia.
- Usando la cartera de clientes: este es un modo de ampliar el volumen de negocio.
- Infraestructuras y recursos humanos: el comprador se ahorra el gasto en nuevas infraestructuras o en la contratación de personal.
Los contras de comprar una empresa con deudas
Como ya hemos dicho, debes ser consciente de que no estás vendiendo un negocio al uso. El empresario con el que llegas al acuerdo asume unos riesgos mayores que debe tener en cuenta . Esto te debe motivar a saber promocionar la venta y apoyarte en personas con experiencia en este tipo de transacciones.
Otras alternativas: liquidar una sociedad con deudas
Para algunos liquidar la sociedad es la alternativa más sencilla -y no siempre la más ventajosa-. Al tratarse de un negocio endeudado, la única opción es la vía judicial. Es decir, solicitar el concurso de acreedores.
¿Qué opción cree que es mejor? En NIO Ventures somos expertos en el tema, contáctanos y te ayudamos a decidirlo.