¿Cuáles son los gastos deducibles en el Impuesto de Sociedades?

Mar 1, 2023

Todos los gastos deducibles en el Impuesto de Sociedades.

El Impuesto de Sociedades es uno de los más complejos que existen e incluyen una serie de deducciones cuya finalidad es servir como incentivo para las empresas.

Continúa leyendo para conocer cuáles son los principales gastos deducibles y qué requisitos hay que cumplir para poder incluirlos en la declaración de impuestos.

 

¿Cuáles son los gastos deducibles en el Impuesto de Sociedades?

El Impuesto de Sociedades consiste en un tributo directo que grava las rentas obtenidas por las personas jurídicas (Sociedades y otras entidades jurídicas que tengan el domicilio fiscal en España). Esta es la principal diferencia con el IRPF que grava las rentas de las personas físicas.

Para saber cuánto hay que pagar en el Impuesto de Sociedades hay que calcular la diferencia entre ingresos obtenidos y gastos. Además, se le descontarán las bonificaciones y deducciones a las que opte la compañía.

Todas las empresas tienen una serie de gastos obligatorios sin los cuales les sería imposible operar. Personal, instalaciones, patentes, materiales, etc., que afectan a los beneficios contables. Con ello se pretende reducir la base imponible.

La Ley no fija una lista cerrada de gastos que una Sociedad puede deducirse. Sin embargo, sí establece unos requisitos obligatorios:

  • Todos los gastos deben estar justificados para deducirse. Es muy importante guardar las facturas, tickets, escritura pública, nóminas, etc.
  • Todos los gastos deben estar relacionados con un ingreso. Es decir, para poder justificarlos cada gasto debe hacerse con la intención de lograr un beneficio.
  • Deberán estar debidamente contabilizados en la cuenta de pérdidas y ganancias. También en una cuenta de reservas si así lo establece la norma.
  • Los gastos deberán imputarse en el periodo impositivo en que se devenguen. 

Aunque no se trata de una lista cerrada, la Agencia Tributaria ha creado una lista de gastos deducibles a modo de ejemplo:

  1. Consumos de explotación.
  2. Sueldos y salarios.
  3. Seguridad Social a cargo de la empresa (incluidas las cotizaciones del titular).
  4. Otros gastos del personal.
  5. Arrendamientos y cánones.
  6. Reparaciones y conservación.
  7. Servicios de profesionales independientes.
  8. Otros servicios exteriores.
  9. Tributos fiscalmente deducibles.
  10. Gastos financieros.
  11. Amortizaciones.
  12. Provisiones.
  13. Amortizaciones y provisiones en estimación directa simplificada.
  14. Incentivos al mecenazgo: convenios de colaboración en actividades de interés general.
  15. Incentivos al mecenazgo: gastos en actividades de interés general.
  16. Otros conceptos fiscalmente deducibles. Pérdidas por deterioro del valor de los elementos patrimoniales.
  17. Seguros de enfermedad.
  18. Pérdidas por insolvencias de deudores.

 

Nuevo gasto deducible: las condiciones para incluir los planes de pensiones

Las empresas que realicen contribuciones empresariales en los planes de pensiones tienen derecho a más deducciones. La deducción solo puede ser de hasta el 10 % y son aplicables para ejercicios sociales desde el 2 de julio de 2022. La base es la siguiente:

  1. A favor de trabajadores con retribuciones brutas inferiores a 27.000 euros, la base de deducción es la totalidad de las contribuciones.
  2. Cuando sea superior a 27.000 euros, la deducción se aplicará sobre la parte proporcional a dicha cuantía.

 

La contabilidad de los gastos de constitución en el Impuesto de Sociedades

Los gastos de constitución se pueden deducir en el Impuesto de Sociedades por su importe neto (base imponible recogida en la factura de gastos). Es decir, pueden incluirse todos los gastos relacionados: honorarios de letrados, notarios, impresión de memorias, etc.

 

¿Cuáles son los gastos no deducibles para el Impuesto de Sociedades?

El artículo 15 de la Ley 27/2014 enumera una serie de gastos que en ningún caso serán deducibles. Estos son los más importantes:

  • Donativos y liberalidades que no estén relacionadas con la promoción de la actividad.
  • Retribuciones de los fondos propios de la Sociedad. Por ejemplo, dividendos o préstamos participativos otorgados.
  • Gastos derivados del Impuesto de Sociedades.
  • Sanciones y multas.
  • Gastos de actuaciones contrarias al ordenamiento jurídico o realizadas desde paraísos fiscales.
  • Gastos desproporcionados producidos por la extinción de una relación laboral.
  • Gastos financieros devengados derivados de deudas con entidades del grupo.
  • Amortizaciones y provisiones que exceden de los límites y supuestos de la norma.

 

¿Cómo contabilizar los gastos no deducibles en el Impuesto de Sociedades?

Independientemente de si el gasto es deducible o no, lo mejor es que la Sociedad incluya todos los gastos en sus cuentas. Aun así, si sabemos que no será deducible fiscalmente, lo mejor es incluirlos es un desglose diferenciado.

Al incluirlos bajo el concepto «gasto no deducible por…» podremos diferenciarlos de forma muy sencilla y tener en cuenta solo aquellos que van a provocar un ajuste en el Impuesto de Sociedades.

 

¿Qué pasa si declaro gastos no deducibles?

En caso de que hayamos incluido un gasto no deducible como si lo fuera, corremos el riesgo de que la Agencia Tributaria decida actuar.

En estas circunstancias exige que se reintegre la cantidad correspondiente y, además, puede establecer sanciones.

Por este motivo es muy importante que estés muy bien asesorado y lleves al día todas tus cuentas. En caso de que no sea así, puedes enfrentarte a multas y pagos que pongan en riesgo tu Sociedad.

En NIO Ventures somos expertos en el tema, contáctanos y te resolveremos cualquier pregunta que tengas.

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